En los comercios sanjuaninos dedicados a la venta de calzado e indumentaria comenzó a evidenciarse otra de las secuelas de la pandemia del coronavirus, la falta de stock de mercadería para la temporada otoño-invierno. Mayoritariamente, lo que está a disposición fue el resultado de las operaciones que cerraron los comerciantes con sus proveedores antes del 20 de marzo, cuando se decretó el aislamiento social obligatorio. Las fábricas cerraron y el transporte de la mercadería se hizo mucho más dificultoso, argumentó como razones principales el presidente de la Cámara de Comercio de San Juan, Hermes Rodríguez. En un marco de incertidumbre, el incremento en general de los precios ronda del 30% al 40% a comparación del invierno pasado. Según el Indec, la inflación interanual para abril fue de 45,6%.

Andrea Arancibia, al frente de ‘Ozbeck’ (indumentaria y calzado para niños y adolescentes), contó su situación: “Lo que tengo es lo que recibí en marzo. Los diez proveedores con los que me manejo, cerraron todos. Y hay artículos que ya no tengo, como le sucede a todos”.

Una temporada particular. Además de tratar de conseguir más clientes, los comercios sanjuaninos debieron lidiar con menos proveedores de lo habitual.

Desde el rubro calzado femenino, Cintia Castillo, vendedora de ‘Heben’, señaló que no hay tanta variedad de productos como los años anteriores y dio como ejemplo especial la oferta de botas. Agregó que no cree que se modifique el panorama durante toda la temporada. Algo parecido sucede con los sweaters para damas, indicó Paula Hernández, quien se desempeña en 'Uma'.

En los negocios de barrio, la situación no es diferente. La mayoría viaja a Buenos Aires y este año no pudo hacerlo. Los que se dedican a las zapatillas deportivas, también describieron el mismo panorama. Cristian Lima, titular de ‘La Comarca’, fue directo: “No llega mercadería hace varias semanas. La mitad de las fábricas argentinas no producen y se cerró completamente la importación de Brasil. El transporte también trabaja con complicaciones porque la flexibilización difiere según la provincia”

Promociones versus pocas ventas

Los consultados coincidieron en que las compras del público se limitan a demandas puntuales. Arancibia aseguró que joggins, calzas y buzos son los más buscados para vestir a los chicos: “Al menos en el rubro de niños, por el sólo hecho que crecen, hay que comprarles ropa y calzados nuevos. Buscan principalmente ropa confortable”.

Mauricio Vicentela, encargado de ‘Equus’, señaló que además de mantener informados a sus clientes via online, se busca concretar ventas en ropa y calzado masculinos con promociones, ya sea en prendas puntuales y también en combos, como por ejemplo en tres prendas para usar en el regreso al trabajo a la oficina. Es usual en los negocios que las promociones sean del 40% y hasta el 60%.

Rodríguez estimó que la caída de ventas a comparación de este mes del año pasado alcanzó el 90% en indumentaria y 70% en calzado. "El país venía con recesión e inflación y en marzo se paró todo. Las fábricas recién empezaron a reabrir esta semana. Y en la desesperación por vender, los comercios no remarcan al mismo nivel de la inflación (45,6% la interanual actualmente), sino que mayoritariamente promedian 30% y algunos 40%. Más allá del stock, el problema es que no se concretan las operaciones de venta", resumió el presidente de la Cámara de Comercio.