En un avance en el proyecto para construir en Valle Fértil otra planta de faena de animales en la provincia, están buscando un terreno adecuado en las inmediaciones de la villa cabecera. La intención es que sea con proyección regional, porque no sólo carnearán sobre todo los vacunos de ese departamento, sino también de los del sur de La Rioja, además de los de Jáchal e Iglesia, con los que están comunicados por la Ruta 150. Será el segundo establecimiento en la provincia porque el primero, ubicado en Rawson, fue inaugurado en mayo del 2019.

"Es importante que la planta de faena cumpla con los requisitos técnicos necesarios para su normal funcionamiento y que además no genere un problema a futuro en la zona de emplazamiento con posibles desarrollos urbanísticos", dijo el intendente Omar Ortiz.

Para que avance la iniciativa, incluso ya han pedido la ayuda del Gobierno nacional, a través del ministro de Agricultura y Ganadería de la Nación, Luis Basterra.

En la tarea de búsqueda del lugar adecuado está participando Alfredo Martín, asesor del Ministerio de la Producción, quien junto a las autoridades del municipio estuvo recorriendo la zona este del departamento con la intención de encontrar un sitio adecuado desde el punto de los requerimientos técnicos para una obra de este tipo.

Con unas 30.000 cabezas de ganado vacuno, según las estimaciones de la Dirección de Desarrollo Pecuario, Valle Fértil es el principal departamento ganadero de la provincia, al punto que concentra alrededor del 60% de animales en San Juan.

Pero el problema, según explicó el intendente Ortiz, es que traer los animales para faenar en Rawson les resulta muy costoso, por la distancia. Por eso quieren contar con su propia planta para procesar la carne en el mismo departamento e incluso el proyecto incluye enlatarla al vacío para poder comercializarla. Y como los departamentos del sur de La Rioja también tienen ganado, al igual que Jáchal e Iglesia, la intención es que sea un matadero con proyección regional. Según la estimación del jefe comunal, con una planta que tenga la mitad de la capacidad de faena que la de Rawson alcanzaría para atender esa demanda. El establecimiento rawsino terminó costando unos 280 millones de pesos y con producción a pleno ocupa unas 50 personas.

Valle Fértil cuenta en la actualidad con un matadero municipal donde se faena parte de la carne que se consume en el departamento. Funciona tres veces por semana, lunes, miércoles y viernes, pero el problema es que está ubicado en plena villa cabecera del departamento, por lo que resulta muy incómoda la tarea. Como pasó en su momento con el matadero de Capital, era un problema el tratamiento de los aguas residuales y se generaban olores que molestaban a los habitantes de la zona.

La planta de Rawson está concesionada a un privado, que paga un canon mensual, y que está a cargo del mantenimiento y de la sustitución de infraestructura y maquinaria, si fuera necesario, además del personal.