Ayer se dieron a conocer las listas preliminares de ciclistas inscriptos para correr el próximo Giro de Italia. En la edición 104 de la "corsa rosa", que se disputará entre el 8 y el 30 de mayo, figura el belga Remco Evenepoel. Quien fuera ganador de la Vuelta a San Juan 2020, que sufrió una rodada en el Giro de la Lombardía, corrido en agosto pasado retornará a la actividad en una carrera de tres semanas. No en cualquier carrera. En el Giro, tal vez la mas dura de las tres que tienen esta extensión (Tour de Francia y Vuelta a España).

Hay quienes lo colocan entre los favoritos, junto a otros dos jóvenes valores como el colombiano Egan Bernal y el portugués Joao Almeida, y varios experimentados Vincenzo Nibali (también está en proceso de recuperación por una fractura en la muñeca de su brazo izquierdo), Mike Landa y Simon Yates. Pero, aún conociendo, la jerarquía que posee el pibe nacido en Flandes, la pregunta del millón es: ¿cómo estará físicamente luego de un período tan prolongado de recuperación tras la fractura de pelvis que sufrió? Evenepoel volvió a subirse a la bicicleta y entrenó en el pasado mes de noviembre, cuando aún no habían cicatrizado bien todas sus heridas internas, después de algunos entrenamientos en los que no se sintió cómodo por algunos dolores sufridos, junto al cuerpo médico de su equipo, el Deceuninck Quick Step, decidió estirar el proceso de recuperación sin pedalear por un tiempo. Volvió a montar su caballito de carbono a mediados de febrero y se dedicó a rodar buscando el fondo necesario.

La cátedra lo coloca entre los favoritos a ganar el Giro, con Bernal, Yates y Landa.

Llamó la atención que no lo hayan "probado" en alguna carrera previa, como para que vaya encontrando el ritmo necesario. Ahora bien, sabiendo que hace cosas diferentes, como subir cincuenta veces seguidas el Muro de Huy (1,3 km con un desnivel medio del 9,3% y rampas de hasta el 26%); hay que dejar una puerta abierta para la sorpresa. Evenepoel vuelve a correr y eso es lo que importa. Los ojos del mundo ciclista estarán sobré su figura de 1,70 m. Decidió volver en una "grande", escenario ideal para demostrar y demostrarse que puede volver a ser. Que el muchacho que el año pasado había ganado cuatro carreras de etapas en el periodo prepandemia, dejará de ser promesa para convertirse en una grata realidad.