Muy sobrado, llegó el velocista colombiano para definir la cuarta etapa, tanto que los últimos veinte metros los hizo festejando. El italiano Elia Viviani fue quien lo escoltó y otro italiano, Nicola Ruffoni, terminó en el tercer puesto de podio.


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El cuarto capítulo de la Vuelta a San Juan tuvo un ganador repetido: Fernando Gaviria. El velocista colombiano que es una de las letales armas del Quick Steep-Floors para pelear embalajes en carreras de un día, respondió al trabajo de su equipo y con gran autoridad cruzó la línea de meta, haciendo estériles los esfuerzos del italiano Elía Viviani (selección nacional de su país), por quedarse con el parcial. Otro italiano, Nicola Ruffoni (Bardiani CSF) entró tercero, compartiendo, como lo hicieron 127 pedalistas, el tiempo del ganador, 3h34m44s para cubrir la distancia de 160,5 kilómetros.


Tal como se preveía los equipos grandes la tomaron como una etapa de transición, tanto fue así que dejaron que se armara una fuga, compuesta por una decena de corredores, que luego se amplió a 13 y que llegó a tener una diferencia de 5m30s, la que, cuando apretaron el ritmo, faltando 25 kilómetros se esfumó, provocando la llegada masiva.

La etapa reina de hoy tendrá 20 km más. Se agregó un circuito en Chimbas.


Antes de que se cumplieran los 30 kilómetros, cuando se transitaba por Santa Lucía, diez ciclistas abrieron una brecha. Juan Molina Espinoza (Selección Argentina), Emiliano Ibarra (SEP-San Juan), Santiago Espindola (ESCO-Agroplan), Edison Bravo (Selección de Chile), Gerardo Tivani (Mun. Pocito), Pablo Anchieri (Selección de Uruguay), Francisco Monte (Asociación Mardan), Héctor Rangel (Selección de México), Alan Ramírez (Mun. Rawson Somos Todos) y Nicolas Naranjo (Agrup. Virgen de Fátima) patearon el tablero. Al pisar suelo angaquero, por calle Eva Perón, se les sumaron tres hombres más: Ricardo Julio (M. de Pocito), Leonardo Rodríguez (Mardan) y Daniel Lucero (M. Rawson). 


Al entrar a Albardón, llevaban 3 minutos de ventaja. Siguieron trabajando parejo, pero comenzaron los inconvenientes. Primero sufrió una pinchadura, Molina Espinoza, que desde Campo Afuera, persiguió hasta conectar entrando de nuevo a Angaco. En calle Sarmiento, un perro que se cruzó ocasionó una rodada y posterior abandono de Francisco Monte. Luego se quedó Espíndola. Los once líderes cumplieron el giro grande, que visitó Angaco y Albardón, con una ventaja de 5m26s. Atrás trabajaba de cabeza, con escasa ayuda, el Bahrain.


Como peligraban los puestos de varios equipos, se pusieron todos a trabajar. En cuestión de medio giro chico (el que iba hasta Santa Lucía, pasando por Caucete y 9 de Julio), se produjo el acople. Faltaban 20 km y no se escapó nadie más. El resto fue la misma película de las dos primeras etapas. El Quick Steep activó su ‘tren’ y ganó la etapa.