Pasaron tres años desde que Laureano Rosas, sin ganar ninguna etapa pero siendo el más regular en los dos tramos corridos en rutas calingastinas, se quedó con la última edición de una competencia ligada a la épica del ciclismo rutero sanjuanino. La Doble Calingasta, esa que en el siglo pasado y en un par de ediciones del Siglo XXI se corrió por la mítica Ruta 12 de las 1.300 curvas, sorteando obstáculos naturales como El Tambolar, y también inconvenientes provocados por la naturaleza, como los cortes provocados por las tormentas que generaban crecidas que bajaban por las laderas de los cerros y "rompían"el camino.
Hablando de crecientes, una de ellas fue la que impidió que los dirigentes de la subcomisión de ciclismo del Club Juan B. Del Bono, montaran su espectáculo en la temporada 2019-2020. El año pasado (calendario 2020-21) tampoco se llevó a cabo por las restricciones motivadas por la pandemia del coronavirus. En esta temporada, luego de esos parates obligados, la pasión rutera retornará al Departamento cordillerano, y lo hará con un formato que beneficiará a todos los calingastinos, porque empezará y terminará allí. Con el agregado que, por primera vez, se visitará uno de los puntos turísticos más importantes que tiene Calingasta: la Pampa del Leoncito.
La carrera será en homenaje a Daniel Castro, ganador de las ediciones de 1987 y "89.
Desde antes del inicio de la obra de la presa Tambolar – Los Caracoles, ya el camino imponía condiciones. Más aún, en un ciclismo tan profesionalizado. Algunos equipos evitaban venir a San Juan porque era una carrera importante pero por las características de su trazado ponían en riesgo los materiales, que al ser importados y estar cotizados en dólares cuidaban para exponerlos en otras carreras con menos nombre, y menos posibilidades de roturas.
La última edición que se corrió por el trazado original fue la de 2003, ganada -como la del año anterior- por Javier Páez. "El Nene", que por entonces corría para el poderoso, y desaparecido, Palmar del Lago, recuerda que neutralizaron la carrera en el kilómetro 36. "Para que la gente se ubique, se cortó pasando lo que actualmente es el Dique de Punta Negra y se relanzó en Pachaco", contó quien, actualmente, es funcionario de la Secretaría de Deportes y director general de la Vuelta a San Juan.
"En el regreso (rememoró también Páez) la neutralización fue luego de bajar el Tambolar y la largaron cerca del puente blanco, pero como quedaba muy corta, fuimos hasta Pocito y después volvimos".
Para evitar complicaciones, como ocurrió en la última versión desarrollada, este año también se realizará toda la prueba en Calingasta. La fiesta del pedal será propiedad exclusiva de los calingastinos, quienes pondrán su color y calor en las banquinas de sus rutas y arterias que cruzan las distintas ciudades del Departamento.
Serán dos etapas el sábado (ver recuadro) y una del domingo. La última, la más larga, irá hasta el ingreso a La Pampa del Leoncito.