Si bien esta Apertura de Sesiones está opacada por lo que fueron las PASO, se trata de un hecho insitucional-político de suma relevancia para la vida de una provincia. Es cuando el jefe del Ejecutivo marca la línea directríz de lo que será el año.

 

 

 

Esta vez tiene dos agregados. Por un lado, inicia el último año de la gestión uñaquista que, tras el 2 de junio, se sabrá si hay cuatro más. Este 2019 servirá para que el primer mandatario haga un balance de lo hecho y lo que está pendiente. Por el otro, el "efecto PASO" que dejó de buen ánimo al oficialismo cuando no han pasado ni 24 horas de haber barrido en las urnas, por lo que se espera que tenga un vuelo político el discurso de cara a un año cargado de elecciones.

 

 

 

Como suele ocurrir en estos casos, la militancia esperó en las afueras a Uñac para vitorearlo y poder estrecharle la mano o robarle una selfie. Estuvieron apostados sobre calle Las Heras casi Libertador.

 

 

 

Los más populosos y claramente identificados, fue la gente de la Agrupación Virgen de Fátima, y militantes de Chimbas. A estos se les suma gente de la UOCRA. En tanto que adentro del recinto esperaron los de la JP

Menos amigables, un grupo de personas que están reclamando frente a la Legislatura por el nuevo sistema que actualiza la cuota de las casas del IPV y que buscarán llegar al Gobernador para trasladarle la inquietud. Así y todo, lo hacen de forma tranquila.