La Cámara de Diputados no sólo aceptó ayer la renuncia del presidente del Tribunal de Cuentas, Isaac Abecasis, sino que recibió las dimisiones de la vice Graciela Chaves y el vocal Aldo Molina, las que también deberá avalar. De esa manera, se irán los tres miembros permanentes, lo que desencadenará una renovación histórica del organismo en el transcurso de dos décadas. En el Gobierno apuestan a proponer los reemplazantes en los próximos días y que la Legislatura los designe este mismo mes, durante el período de sesiones ordinarias, dijeron fuentes oficiales. A todo eso se suma que también se producirá el recambio de los dos vocales transitorios (Enrique Conti y Daniel Pérez Celedón), cuyos mandatos, de cuatro años, finalizan en diciembre.

En octubre de 2022, este medio había adelantado la renuncia de Abecasis para acceder a la jubilación, un trámite que demoró en Anses debido que, según contaron las fuentes, hubo problemas en el cómputo de sus aportes cuando se desempeñó en la actividad privada. Además, siguió en sus funciones hasta que la Cámara le dio el OK a su retiro. En agosto, DIARIO DE CUYO también anticipó que circulaba la versión de la partida de Chaves, lo que se terminó de confirmar ayer, además de que se sumó la de Molina.

El presidente y la vice habían asumido en 2004, en el primer Gobierno de José Luis Gioja, mientras que Molina se hizo de la Vocalía en 2012, luego de estar al frente del Ministerio de Hacienda en dos períodos de la gestión giojista. Los tres son puestos clave en el organismo encargado del control posterior del gasto público de las reparticiones del Gobierno, los municipios, empresas del Estado y organismos descentralizados. De acuerdo a la Constitución, son designados por la Cámara de Diputados, a propuesta del Ejecutivo, y dichos funcionarios permanecen en sus cargos mientras dure su buena conducta. Es decir, sólo pueden ser removidos a través de un juicio encarado por el Jurado de Enjuiciamiento. Salvo que, como se da en estos casos, se retiren para jubilarse.

Luego de que la Legislatura aprobara su renuncia, Abecasis dejará su puesto y, luego tiene que producirse la misma aceptación a las presentaciones de Chaves y Molina. En la Cámara de Diputados confirmaron que habrá sesiones el 9 y el 23 de este mes, mientras que, de ser necesario, se dará otra el 30. En la gestión uñaquista apuntan a tener las propuestas de reemplazantes y que los nombramientos se produzcan en el periodo de sesiones ordinarias. El oficialismo cuenta en la actualidad con la mayoría necesaria para aprobar a los sucesores.

Luego, están los vocales transitorios, los que también designa la Cámara, pero a propuesta de las dos bancadas principales de la minoría. "En orden subsiguiente al partido mayoritario", indica la carta magna. Hoy, la fuerza con más legisladores es el PJ, mientras que la primera minoría la tiene Producción y Trabajo (que impulsó al bloquista disidente Conti) y la segunda quedó para el bloquismo (que apostó por Pérez Celedón). En la próxima conformación de la Legislatura, el justicialismo sigue siendo mayoría, con 15 diputados que entraron con la lista de Uñac. La primera minoría sigue siendo Producción y Trabajo con ocho legisladores, pese a que es el partido principal que está al mando de la provincia, por lo que le tocará proponer a uno de los vocales transitorios. El bloquismo cuenta con tres diputados y le correspondería el restante el cargo. Se verá si hay una disputa sobre ese tema.

La selección del reemplazante del presidente del Tribunal también estuvo en la picota, al igual que las designaciones de 14 cargos judiciales, cuando el vicegobernador electo Fabián Martín dijo en Radio Sarmiento que en Juntos por el Cambio no querían militantes ni exfuncionarios uñaquistas.

Requisitos

Según la Constitución, el presidente y el vice deben reunir los requisitos exigidos a los miembros de la Corte de Justicia. Es decir, deben ser abogados. En cambio, los tres vocales deben tener título en materia económica, contable, financiera o administrativa.

> Antecedentes

El Tribunal de Cuentas fue creado con la reforma constitucional de 1986. La crisis en el organismo estalló a fines de 2002, ya que, durante en ese plazo de funcionamiento, se lo cuestionó por ineficaz. Así, ingresó un pedido de Jury de Enjuiciamiento contra el entonces presidente Mario Tello Luján y el vice Gustavo Delgado, ambos bloquistas. El primero renunció cuando se vio acorralado por el avance del proceso, mientras que el segundo decidió resistir, aunque cayó destituido en diciembre de 2003 por incumplimiento de los deberes a su cargo. El 15 de diciembre de 2003 renunció el vocal permanente Raúl Leiva, bajo el argumento de que se renovara completamente la tan cuestionada cúpula del Tribunal. Leiva había ingresado en 1995, propuesto por el entonces gobernador justicialista Jorge Escobar. En 2004, asumieron Isaac Abecasis en la presidencia, Graciela Chaves en la vicepresidencia y Pedro Belenguer como vocal, pero este último renunció en 2012. En ese año, tomó la posta Aldo Molina. Esos tres miembros permanentes continuaron hasta este año.