Composición plena. Con la llegada de Adriana García Nieto, la Corte quedó con sus cinco integrantes. Desde el lunes tendrá cuatro con la salida de Adolfo Caballero y desde el 1 de enero quedará con tres al irse Abel Soria Vega.

El último integrante de la vieja guardia de la Corte de Justicia, Humberto Medina Palá, postergará su renuncia para el año que viene. Así lo indicaron fuentes calificadas, quienes sostuvieron que la decisión del ministro se debe a una cuestión operativa, es decir, para no complicar el trabajo interno del máximo tribunal. Si el magistrado presentara su dimisión durante este año para que su salida se concrete a principios del próximo, las fuentes explicaron que habría complicaciones administrativas y de funcionamiento. Es que el cuerpo colegiado, que originalmente cuenta con cinco miembros, se quedaría sólo con dos y necesita de al menos tres para actuar plenamente. Si se diera la situación de que hubiera dos cortistas, deberían llamar permanentemente a un tercer integrante (un camarista) para firmar resoluciones judiciales y decisiones de la sala de Superintendencia, tribunal que aplica sanciones, instrumenta las licencias y realiza la administración y distribución del personal.

Medina Palá le había dicho en septiembre a este medio que iba a dar un paso al costado este año, luego de que el presidente de la Corte, Abel Soria Vega, presentara su renuncia, condicionada a que la Anses le otorgara el beneficio de la jubilación. En el máximo tribunal todos esperaban que el organismo nacional resolviera el beneficio entre marzo y abril, pero tardó mucho menos y el lunes le comunicó al cortista que deberá dejar sus funciones a partir del primero de enero. Esa definición tomó por sorpresa a todo Tribunales y obligó a Medina Palá a postergar sus planes de salida. Además de Soria Vega, el que también dejará la Corte es Adolfo Caballero, quien presentó su renuncia en abril y la Anses le informó que a partir del sábado comenzará a cobrar sus haberes como jubilado. De esa manera, la Corte tendrá tres miembros a partir del 1 de enero de 2019: Medina Palá, Guillermo De Sanctis y Adriana García Nieto.

Las fuentes recordaron ayer que la casi totalidad de las resoluciones del máximo tribunal llevan las firmas de al menos tres ministros y si por alguna razón el cuerpo colegiado se queda con dos, necesariamente debe convocar a un juez de Cámara. Por eso ahora la presencia de Medina Palá es necesaria, para que no haya trabas ni demoras en la definición de las resoluciones judiciales y administrativos. La misma situación ocurriría si algunos de los tres cortistas decide excusarse en alguna definición. En ese caso también deberá sumarse otro magistrado para la subrogancia.

La denominada vieja guardia de la Corte estaba compuesta por Carlos Balaguer, Juan Carlos Caballero Vidal, Caballero, Soria Vega y Medina Palá. Entre los cinco comandaron por poco más de 20 años la Justicia sanjuanina y en ese tiempo fueron duramente criticados por todos los actores judiciales de haber sometido al Poder Judicial a un letargo. El primero en salir fue Balaguer, en 2016, y en su lugar fue designado Guillermo De Sanctis. Luego, en 2017, fue el turno de Caballero Vidal, que se vio obligado a renunciar tras un pedido de juicio político en su contra por la investigación de su presunta vinculación en delitos de lesa humanidad durante la dictadura militar. Quien fue elegida este año para ocupar su vacante fue Adriana García Nieto. Ahora es el turno de Caballero y a partir de enero, el de Soria Vega. Así, con la salida el año que viene de Medina Palá, que habrá sumado 25 años en el cargo, la Corte completará su total renovación, ya que se espera que se designen a tres nuevos cortistas.

Presidencia
 

Con la salida de Abel Soria Vega a partir del 1 de enero, la presidencia de la Corte de Justicia quedará en manos de Guillermo De Sanctis, quien a su vez continuará en ese cargo desde marzo, mes en el que se renueva el máximo puesto dentro del Tribunal. En 2020 el lugar estará en poder de García Nieto.