Los minutos parecieron eternos después de que una beba de sólo 8 meses dejó de respirar de repente. Su familia, que estaba con la criatura a orillas de la pileta de El Pinar, en Rivadavia, notaron que algo no estaba bien y pidieron auxilio a los guardavidas. En ese momento, se acercó también el enfermero que está por prevención en el lugar. Juntos, lograron sacar de la garganta de la beba una pelotita que se había tragado accidentalmente y así le salvaron la vida.

El hecho se produjo este domingo, cuando la familia oriunda de San Luis disfrutaba del natatorio junto decenas de personas.

La beba, de la cual no trascendió la identidad, estaba recostada sobre una manta a orillas de la pileta cuando su abuela notó que no respiraba. De inmediato pidió auxilio a los guardavidas Roberto Rodríguez, José María Nart, Pilar López,  Nicolás Escales y Leandro Reinoso, y al enfermero Ezequiel Godoy; quienes se acercaron y le practicaron la maniobra de Heimlich, con la que lograron abrir las vías respiratorias de la niña, que se había tragado una pelotita que cayó de alguno de los arboles del lugar.

Después del susto, la menor fue trasladada en una movilidad especial junto al enfermero al Hospital Marcial Quiroga, donde la examinar y determinaron que estaba en perfecto estado de salud.