En la madrugada de ayer, a dos minutos de la 1 de la mañana, publicó en su whatsapp ‘Jugando al juego de la ballena azul’ y 4 minutos después ‘Adios a todos. Los amo’. Tiene 14 años, vive con sus padres y 3 hermanos en Rawson y ayer cerca de las 7 su familia lo asistió cuando se desmayó en el baño. Pidieron auxilio médico y el menor fue trasladado a Urgencias del Hospital Rawson, donde le realizaron análisis, lavaje de estómago y una tomografía, según contó un hermano mayor, que reside en Mendoza.


A las 11 ingresó a Terapia Intensiva del Hospital de Niños y a las 14 abrió por primera vez los ojos. Como siguió evolucionando favorablemente, luego fue trasladado al box 11 de Terapia Intermedia.


“Después que se descompuso, vi un paquete de pastillas arriba de la mesa”, señaló su padre mientras aguardaba con otros familiares en el hall del nosocomio.


¿La supuesta ingesta de cápsulas para controlar la presión alta fue el acto concreto de los mensajes que escribió pasada la medianoche?

EL MACABRO JUEGO


El origen del juego de la ballena azul fue en la red social VK, la más popular en Rusia, en la que los participantes deben cumplir un listado de 50 desafíos, que van desde dibujar una ballena a realizarse cortes en el cuerpo. Y el último es suicidarse (ver recuadro).


Si bien la edad del menor sanjuanino coincide con la del perfil de las víctimas (adolescentes básicamente), en su entorno no tienen la certeza que haya estado realmente incluido en un grupo del ‘juego’ o sólo realizó las publicaciones. Es que no realizó acciones que hayan sido señales.


Además de los dos mensajes ya mencionados, en su muro de Facebook antenoche también realizó varias publicaciones. En una pide perdón a otra persona (sólo tipea sus iniciales) y en otra publica una foto con una ballena ‘tatuada’ con cortes en un brazo, la inscripción “me dejarías jugar? a la ballena azul”. Entre los comentarios hay respuestas afirmativas.


Como es menor y realizó un acto privado, debe preservarse su identidad y la de su entorno. Su hermano mayor afirmó, al cierre de esta edición, que procuraban por su recuperación pero que todavía no habían tocado el tema.


Ante la pregunta al padre sobre si tuvo relación el desafío, respondió: “Así me han dicho.

Pero yo no estaba al tanto ni siquiera que eso existía. Hace un ratito me vengo a enterar”.


Una hermana de la madre, enterada por sus hijas, le contó respecto a las publicaciones en Facebook. Lo importante en este momento para todos es que la evolución sigue siendo favorable. 

Centenar de víctimas

El juego de la ballena azul ya se encuentra relacionado a un centenar de casos de adolescentes que se suicidaron, pero el problema para los investigadores es que no hay siempre evidencia concreta de que estén relacionados con comunidades online suicidas.


Su presunto autor original, el ruso Philipp Budeikin, de 21 años, fue apresado en noviembre del año pasado. Confesó que indujo a 17 adolescentes al suicidio. “Sí, realmente lo hice. Les di lo que no tienen en la vida real: calidez, comprensión y comunicación”, afirmó en una reciente entrevista y agregó: “Estaba limpiando nuestra sociedad de tales personas”.


Hay otros casos en España, Portugal, Brasil, Chile y Colombia. Pero no se sabe si otras personas asumieron el rol de ‘curador’ o administrador y crean sus propios grupos de la muerte o si simplemente se convirtió en una leyenda urbana a la que siguen chicos conflictuados.