La tierra está que arde. Ya sea por variabilidad, o bien cambio climático, las olas de calor aumentaron en cantidad y duración en la última década.


La pasada semana comenzamos un análisis sobre cambio climático de la mano del Geocientífíco Silvio Pastore. Hoy, en esta segunda nota, el agro climatólogo Cristian Albors nos diferencia entre cambio y variabilidad climática, diferenciando ambos conceptos por decenios a siglos de ocurrencia.


"Según la Real Academia Española, la palabra calor se define como "Sensación que se experimenta ante una temperatura elevada'. Esa sensación se debe a la exposición por parte de los seres vivos a condiciones de la atmósfera reinantes como elevadas temperaturas y humedales relativas altas o bajas", señala Albors. 

El ingeniero Cristian Albors, agroclimatólogo de la UNSJ, expuso el presete trabajo recientemente en un congreso.


"Los eventos meteorológicos extremos son responsables de pérdidas tanto de distintas formas de vida como económicas. Por ello huracanes, tornados, inundaciones, sequías, o episodios de altas o bajas temperaturas son objeto actual de un particular seguimiento", explica.


Las olas de calor "son eventos meteorológicos extremos, provocan pérdidas económicas en el ámbito agropecuario debido a que causan una reducción en el rendimiento de los animales y plantas e incluso su muerte. No solo afecta a las plantas y animales. También tienen una incidencia notable en sequías, desertificación e incendios forestales".


"En la última semana del mes de enero de 2003, una ola de calor afectó la porción centro-norte de Argentina. Las temperaturas más extremas se observaron en la parte oeste de Argentina, en la región de Cuyo, donde se registraron valores superiores a los 40°C. Sin embargo, la temperatura más elevada en aquel día se registró en San Juan con 45.4°C", recuerda.


"El climatólogo Norte y otros (2007) encontraron que aquellas olas de calor que ocurren en verano tienen una cierta recurrencia hacia fines del mes de diciembre (bautizada como "Ola de Calor de Navidad") y hacia la segunda quincena de enero", relata.


El presente trabajo tuvo como objetivo "identificar y describir las olas de calor que ocurrieron en el departamento de Pocito durante el mes de enero desde 1968 hasta el 2021. Este análisis se realizó sobre la base de datos meteorológicos provista por la EEA INTA San Juan ubicada en el departamento de Pocito a los 31°39"14"" de latitud y 68°35"15"" de longitud, y a una altura sobre el nivel del mar de 615 m, con una longitud de la serie de datos de 53 años (1968-2021)".

El vegetal pasa de un estado normal, de crecimiento, desarrollo o fructificación, a un momento de estrés severo, que lo afecta a futuro.


Para identificar las olas de calor "se trabajó con la definición del Servicio  Meteorológico Nacional -SMN- la cual utiliza el percentil 90 de la temperatura máxima y mínima, calculado a partir de los datos diarios, en este trabajo para el mes de enero". Dicho de otra manera, "es la temperatura por encima de la cual se encuentra dentro del 10% de temperaturas más altas para ese lugar, acorde al registro histórico de cada localidad. Superado ese umbral, se considera que una temperatura es extrema." 


"Los días en que se alcance una temperatura superior a la de corte o 37,2°C (percentil 90) se calificarán de extremadamente calurosos. En cuanto al grado de persistencia de días extremadamente calurosos -según SMN-, se exigió que existan tres días seguidos que sean iguales o que superen la temperatura. Identificadas las olas de calor se procesaron y se realizó una caracterización para observar su comportamiento. Se obtuvieron valores de frecuencia por quincena y por década, además se obtuvo la duración en días de las olas de calor (OC) y las temperaturas máximas registradas durante la ola", afirmó. 


 

CONSECUENCIAS: 


* DESHIDRATACION: Cualquiera sea el cultivo y la fase fenológica en que se encuentre, lo más dañino es la deshidratación que sufre el órgano o parte de la planta.

* SHOCK: El vegetal pasa de un estado normal, de crecimiento, desarrollo o fructificación, a un momento de estrés severo, que lo afecta a futuro.

* FUTURO: Ya nada será igual, dentro del desebvoliminento de un cultivo, luego de la ola de calor, por el desbalance y la variabilidad que causa ese efecto.

  • Cada vez más extensas e insistidoras

 

El estudio desarrollado con la información estadística procesada por el ingeniero Cristian Albors y sus colegas investigadores, entre sus resultados "obtuvo como temperatura de corte para el mes de enero en el departamento de Pocito de 37.9 °C. Por lo tanto, se identificaron un total de 17 Olas de Calor -OC- en toda la serie°. En la infografía puede observarse °su distribución por décadas. Se destaca el mayor valor alcanzado, 9 OC, para los años comprendidos entre el año "10 y el "21. También podemos decir que hubo años que registraron 2 OC -años "06, "12, 17- y que la quincena del año que más acumuló estos eventos fue la segunda, con un total de 11".


Otro punto a resaltar "es la duración en días de las OC. Podemos ver que ronda los tres 3 días promedio con un máximo en la última década de 3.7. Acá se resalta que los años 2010 y 2021 fueron los que registraron las olas más duraderas, con 5 días totales".


Albors indicó en cuanto "a temperaturas registradas como máximas durante los eventos se observa que en el 2003 se alcanzó el récord con 42.8°C. El resto fue variable entre este y 38°C. Cabe destacar que el valor medio de temperatura máxima alcanzada en los 17 eventos de OC registrados en Pocito para el mes de enero es de 40.1°C".


Por último, "es de advertir el aumento notable en la frecuencia de eventos en la última década, triplicándolo frente a las anteriores, además de un leve aumento de 0.2 días en la duración de las OC".

  • CONCLUSIÓN

"Es importante el aumento de OC en la última década en Pocito, además de la duración de las mismas, aunque leves, también es de advertir que en la década del "90 del siglo pasado, no se registraron olas de calor en el departamento analizado". También, "deja en evidencia la predominancia de ocurrencias de OC en la segunda quincena del mes de enero".


Con lo anterior "ponemos como ejemplo un caso de variabilidad, insistimos en nuestra posición frente al tema, por el momento es un caso de variabilidad que ponemos en evidencia con el análisis de las olas de calor, otra cuestión a destacar es que no hay una definición de olas de calor que se haya consensuado a nivel global, entonces esto puede cambiar cuando avancen los conocimientos y por ende los resultados que mostramos".


En definitiva, "no queremos demostrar nada, simplemente mostrar lo que observamos como se dijo anteriormente con el objeto de acercar información para aquellos que estén interesados para que cuenten con una herramienta más, tomen acción si es posible, sean críticos y activos partícipes de todo esto".


"Los fenómenos meteorológicos extremos, sucedieron en la antigüedad, y en los tiempos de nuestros abuelos y padres, no debemos temerles debemos hacer uso de lo que tenemos a nuestro alcance, tecnología y conocimiento para estudiarlos, describirlos y así trasformar esos datos en información útil para tomar acción y que sus impactos tantos para la población como para actividades económicas locales no sean de importancia o puedan ser mitigadas", finalizó el ingeniero Albors.