Tras un plazo récord de 10 meses de construcción y una inversión de U$S 2.500 millones, este 9 de Julio será histórico ya que se pone en marcha el Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK), una obra que cambiará la matriz productiva de la Argentina y que marcará el primer paso hacia la independencia energética del país.

Tan sólo la inauguración de la primera parte de la obra permitirá aumentar hasta un 25% el transporte de gas de Vaca Muerta, la segunda mayor formación de gas no convencional del mundo. "Y se prevé que para 2030 genere ingresos de U$S 18.000 millones por año en exportaciones energéticas" lo que pone al país "camino al autoabastecimiento", según anticipó ayer el ministro de Economía, Sergio Massa. La construcción de esta primera parte del gasoducto, por la envergadura de su concreción, dejó un impacto equivalente a más del 12% del Producto Bruto Geográfico (PBG) en la zona de influencia por la que pasa el tendido, junto con la creación de 40.000 puestos de trabajo y un fuerte impulso en materia de innovación tecnológica.

Lo que comenzará a funcionar hoy es el primer tramo de la obra, 573 km que une la localidad de Tratayén, de Neuquén (centro sur), donde se ubica Vaca Muerta, con Salliqueló, de la provincia de Buenos Aires (centro). Desde allí se abastece de gas al centro del país. La traza también pasa por Río Negro y La Pampa. Se utilizaron aproximadamente 300.000 toneladas de cañerías, lo que equivale a 4.285 obeliscos porteños, en el tendido de la primera etapa.

El acto de la inauguración del gasoducto en este Día de la Independencia también dejará un fuerte impacto en lo político ya que contará con la participación del presidente Alberto Fernández; la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner; Sergio Massa, gobernadores, entre otros. Y será el inicio de la campaña del oficialista Unión por la Patria (UxP), que contará con la foto de unidad con todos sus líderes embanderados detrás del gasoducto.

El acto se llevará a cabo en un predio lindero a la planta Saturno que opera la transportista TGS, que será el punto de vinculación con el gasoducto Neuba II, a través del cual llegará el gas producido en Vaca Muerta en una primera instancia con 11 millones de metros cúbicos por día (m3d) hasta el Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA). Este volumen se incrementará a 21 millones de metros cúbicos con la puesta en marcha de dos plantas compresoras adicionales.

El gasoducto, que comprende una segunda etapa próxima a ser licitada para completar otros 1.050 km de extensión, es un componente central del conjunto de obras destinadas a ampliar la capacidad del sistema de transporte de gas y a optimizar su utilización, con nueva infraestructura y su interconexión de los sistemas de transporte existentes.

MÚLTIPLES BENEFICIOS

El potencial del GPNK radica en las posibilidades de autoabastecimiento, en la exportación futura de gas natural y en mejoras en la competitividad industrial del país, por el desplazamiento de combustibles más caros por el gas natural de Vaca Muerta. Entre sus múltiples efectos positivos se destaca en primer lugar, que contribuirá a revertir el déficit energético, no sólo porque permite sustituir importaciones sino debido a que posibilitará la exportación de gas proveniente de Vaca Muerta en meses de baja demanda interna por cuestiones estacionales. Ese ahorro de divisas también tendrá un impacto positivo en la economía.

Desde 2011 a esta parte, Argentina registró un saldo negativo por U$S 3.000 millones anuales. Con la puesta en funcionamiento del GPNK se estima reducir las importaciones de gas en U$S 2.200 millones en el corriente año y U$S 4.400 en 2024. Esta última cifra equivale al saldo negativo registrado durante el 2022.

Otra de las ventajas que generará la puesta en marcha de este proyecto es la posibilidad de abastecer de gas, tanto a industrias como a usuarios residenciales, a precios competitivos. El gas de Vaca Muerta es significativamente más económico que el importado: en 2022 se pagó un promedio de U$S 3 por millón de BTU, en tanto que la licitación para el invierno de 2023, según datos de Enarsa al 24/4/2023, arrojó un precio promedio de U$S 17,8 para el GNL importado. Esto tendrá un triple impacto: mejorará la ecuación de costos de producción de la industria, así como también el poder adquisitivo de los hogares al tiempo que permite la paulatina eliminación de los subsidios energéticos.

Un aspecto tal vez poco mencionado es el medioambiental. La ampliación de la capacidad de transporte de gas que implica este proyecto redundará en una importante reducción del uso de combustibles fósiles (fuel oil y el gasoil, relativamente más contaminantes que el gas natural) en la generación de electricidad. Por otra parte, la obra permitirá no sólo avanzar hacia el autoabastecimiento en materia energética, sino que permitirá que el país se posicione como uno de los proveedores de gas de la región ante el declinamiento de la producción boliviana. Si bien hacen falta obras adicionales para llegar a lograr este objetivo, se puede pensar en dejar de importar gas desde Bolivia e incluso llegar a exportarlo, así como también abastecer a Brasil y Uruguay.

> La más importante en cincuenta años

La obra de ingeniería, considerada como la más importante de los últimos 50 años, se concretó en un plazo récord de 10 meses y atravesó cuatro provincias: desde la planta de tratamiento de gas en la neuquina Tratayen, emplazada en el corazón de Vaca Muerta, pasando por Río Negro, La Pampa, hasta Salliqueló. Permitirá ampliar la capacidad de transporte de gas de vaca Muerta que sin esta obra veía limitado su poder de producción. Al hacer llegar el gas a los centros de consumo, permitirá un ahorro anual de U$S 4.200 millones al año en sustitución de importación de gas natural licuado, combustibles líquidos y energía eléctrica.

La construcción demandó un avance promedio de 5 km diarios de soldadura de caños. Se emplearon soldadoras automáticas para la unión de los caños, lo que permitió duplicar la productividad de la obra.

La financiación
62
mil millones de pesos proporcionó desde 2021 hasta ahora el denominado “impuesto a los ricos” para la construcción del gasoducto Néstor Kirchner.

En tan sólo 178 días
El GPNK, su traza troncal y las dos estaciones terminales, se hizo en tiempo récord. Pasaron 178 días entre la primera soldadura el 16 de noviembre de 2022 en Salliqueló, y la última, que fue el 12 de mayo.

Área de influencia
102
mil km2 es el área de infl uencia que abarca el gasoducto donde viven menos de 1 millón de personas, un 2% de la población total del país.

  • Los datos curiosos de este proyecto

*La prioridad en la construcción del gasoducto fue la contratación de trabajadores provenientes de las provincias donde se realizó la obra, para la cual se incorporaron 340 mujeres que representaron un 6,9% del total, pero en casos específicos se debió recurrir a expertos calificados del exterior.

*Es que el proyecto que lleva adelante la empresa estatal Energía Argentina junto a las tres grandes contratistas privadas ocupó un 60% del total de sus trabajadores con mano de obra proveniente de zonas cercanas al tendido del gasoducto que atraviesa cuatro provincias: Neuquén, Río Negro, La Pampa y el oeste de Buenos Aires.

*En materia de empleo se afirma que la obra principal, que se abarcó en tres frentes simultáneos a lo largo de la traza, tuvo un fuerte impacto en la generación de puestos de trabajo y alcanzó los 5.500 directos y unos 40.000 si se consideran los indirectos.

*Una vez modificada la matriz energética, la energía local será más barata que la importada, y eso impactará sobre el costo de la electricidad, dado que en Argentina, el 60% de la energía se produce a base de gas, gasoil y/o fuel oil.

*La mayor producción a precios más bajos podría hacer descender el costo de U$S 90 a U$S 70 por MW/h, y provocar un impacto positivo sobre el empleo, las regalías provinciales, y los impuestos, aflojando la presión sobre los aumentos tarifarios. Así bajarán también los multimillonarios subsidios energéticos.

Más de 9.000 transportes fueron necesarios para llevar a buen puerto la ejecución de este proyecto histórico.