El ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva anunció que denunciará a la compañía estadounidense Netflix por "O Mecanismo" (El mecanismo), una serie que recrea el mayor escándalo de corrupción de la historia de Brasil y que ha levantado una intensa polémica en su país.

"Aviso que nosotros vamos a denunciar a los responsables (de la serie) aquí o en cualquier lugar. Es una mentira más", afirmó el ex mandatario en un acto en la ciudad de Curitiba, que marcó el cierre de su gira por el sur de Brasil.

"No tenemos que aceptar eso y yo no lo voy a aceptar", aseveró Lula, quien fue condenado en enero pasado a 12 años de cárcel por corrupción pasiva y lavado de dinero, y aparece retratado en la citada pieza.

La serie se estrenó el pasado viernes con una primera entrega de ocho capítulos y está inspirada en la operación "Lava Jato", a partir de la cual fue condenado el ex jefe de Estado (2003-2010) en uno de los siete procesos penales abiertos en su contra, la mayoría por sospechas de corrupción.

La producción transcurre entre 2003 y 2014, durante los Gobiernos de Lula y su sucesora en la Presidencia, Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT).

La polémica, levantada por los sectores de la izquierda brasileña, se generó especialmente por el episodio en el que se atribuyen a Lula unas explosivas declaraciones realizadas por el senador Romero Jucá, quien también está investigado por su implicación en el escándalo de la petrolera estatal Petrobras.

Lejos de amedrentarse por las declaraciones de Lula, desde el departamento de marketing de Netflix en Brasil redoblaron la apuesta.

Tobilleras electrónicas doradas o de cuero con tachas, manuales para delatar cómplices y ropa interior con bolsillos cargados de billetes, forman parte de la polémica colección de productos que se venden en las "tiendas de la corrupción", stands montados por Netflix en varios aeropuertos de Brasil para promocionar la serie que enojó a Lula y a Dilma Rousseff.

La caravana de Lula, que recorrió durante los últimos diez días varias localidades de la región sur del país, ha estado marcada por distintos altercados como bloqueos en carreteras y el lanzamiento de piedras y huevos por parte de opositores.

Sin embargo, el incidente más grave ocurrió en la víspera, cuando el micro que transportaba a los periodistas que cubrían la gira recibió dos disparos, mientras que otro con invitados del PT fue impactado por al menos un proyectil, sin que se registraran heridos.

La gira de Lula, la cuarta en los últimos meses, se produce en un momento en el que la Justicia brasileña ha estrechado aún más el cerco sobre el ex mandatario tras ser condenado en enero pasado por un tribunal de segunda instancia a 12 años de prisión.

En su sentencia, ese tribunal determinó que el ex mandatario sea preso una vez sean agotados los recursos en esa instancia, lo que podría ocurrir en las próximas semanas, si el Supremo niega el "habeas corpus" preventivo solicitado por la defensa.