
Pensando en la Copa Libertadores, cuyo partido deberá afrontar el próximo miércoles, Guillermo Barros Schelotto decidió jugar el encuentro por la Superliga frente a Gimnasia con un equipo integrado mayormente por suplentes. Y el resultado no fue el mejor para los Xeneizes, que cayeron por 2 a 1 en La Plata.
Fue un flojo remate de Comba corregido por Tijanovich el primer aviso del Lobo, dado que Rossi tuvo que intervenir con solvencia para evitar la caída. Unos instantes después, a los 11 minutos, el exdelantero de Defensa y Justicia y Agropecuario se asoció con Faravelli y el rosarino festejó el 1 a 0. La conquista tripera desacomodó al Xeneize y las inseguridades de su arquero volvieron a aparecer.
Antes del descanso llegó la reacción de Boca. Fue en el momento justo. Un envío de Goltz encontró a un Espinoza endemoniado, quien se sacó de encima a su marca con el cuerpo y resolvió con precisión con un disparo cruzado: 1 a 1. Guillermo llegó al vestuario con la tranquilidad del tanto para resolver el flojo desempeño de sus dirigidos.
Sin embargo, en la reanudación del choque Gimnasia volvió a capitalizar la desconcentración defensiva de la visita. Otra vez Tijanovich abasteció a sus compañeros para que el Lobo vuelva a celebrar. En este caso, fue Comba el que se aprovechó de las falencias de la zaga central.
Así, del mismo modo que ocurrió en la Copa Argentina, el Tripero volvió a amargar a Boca. Si bien en esta ocasión se dio en un contexto diferente, porque los del Mellizo sólo piensan en la obsesión de conquistar la séptima Libertadores, los platenses sentenciaron el destino del duelo y privaron al Xeneize de acercarse a la cima. En el Bosque hubo final feliz para el Tripero.
Fuente: Infobae
