Y un día, Buenos Aires 2018 llegó a su final. En unos Juegos Olímpicos de la Juventud que tuvieron un porcentaje de asistencia récord, cumplieron sus 12 días de duras competencias con una actuación Argentina que rompió todos los pronósticos con 32 medallas.

Tal como se había anticipado, la ceremonia de cierre sería muy distinta a la inauguración en la avenida 9 de Julio y se tuvo la presentación de un grupo de folklore para interpretar el himno nacional, con la voz de Soema Montenegro.

Minutos más tarde, las 206 banderas que representaron a los 4012 atletas que participaron de la tercera edición de los Juegos Olímpicos de la Juventud comenzaron a desfilar, con el cierre de la insignia nacional, portada por la medallista de oro en canotaje, María Sol Ordas.


En el escenario también se hicieron presentes los representantes de Senegal, quienes serán los encargados de organizar los próximos Juegos de las categorías menores. En un acto donde estuvo presente el Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, se hizo el paso de mando de la bandera olímpica a los africanos.

Con el tradicional apagado de la llama olímpica y una serie de fuegos artificiales, se dio por concluida la tercera versión del evento juvenil. Muchos de ellos estarán presentes con los mayores en Tokio 2020, mientras que algunos buscarán su revancha en Dakar 2022.