Boca Juniors perdió con Fluminense de Brasil por 2 a 1 en la prórroga de una dramática final de Copa Libertadores de América igualada 1-1 en el tiempo reglamentario y disputada con tensión en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.

El delantero Kennedy, ingresado desde el banco, hizo el gol decisivo con una volea a los 100 minutos y luego vio la segunda amarilla por excederse en los festejos.

Al finalizar el primer tiempo agregado, el colombiano Frank Fabra fue expulsado por aplicarle irresponsablemente una cachetada a un rival, lo que impidió al equipo argentino jugar con superioridad numérica en el tramo final del partido.

El "Xeneize" forzó el tiempo extra gracias a un tanto del defensor peruano Luis Advíncula, su goleador en la competencia (4), con un remate desde afuera del área a los 28 minutos del segundo tiempo.

Fluminense estaba en ventaja desde los 36 minutos del primero por un tiro rasante del argentino Germán Cano, luego de una jugada colectiva bien elaborada por el sector derecho del ataque brasileño.

Boca vio frustrado su tercer intento de atrapar la séptima estrella para igualar a Independiente como el equipo más ganador de la Libertadores y Fluminense consiguió su primer título internacional en su ciudad y frente a su público.