En el aire. El tucumano Gerónimo Padilla, nuevo líder del campeonato argentino, vuela en Albardón (arriba). El Rally de San Juan tuvo un desafío especial por la dureza de sus caminos (abajo). (FOTOS: MARCOS CARRIZO)


Para muchos, la carrera más dura en años del Rally Argentino. Los caminos fueron un exigente desafío para los participantes, al punto que se cobraron más de la mitad del parque automotor que largó el Rally de San Juan, válido por los campeonatos nacional y Sudamericano. De las 62 máquinas que partieron el sábado en la primera etapa sólo 23 pudieron completarlo, aunque varios de ellos se reengancharon ayer tras haber abandonado en la jornada inicial. El ganador de la clasificación general fue el paraguayo Gustavo Saba, a bordo de un Skoda Fabia del campeonato FIA Codasur, escoltado por el fueguino Luciano Preto, con un Chevrolet Agile, quien a su vez fue el mejor en el clasificador del Rally Argentino. En tanto, de los siete sanjuaninos que largaron la prueba sólo llegó Sebastián Landa (Ford Ka), quien no pudo debutar mejor en la categoría pues quedó con la victoria en la RC5.


El rally nacional volvió después de nueve años a San Juan, mientras que el Sudamericano nunca antes se había presentado. De los 13 tramos que conformaron las dos etapas, 12 fueron durísimos y ya el sábado (en Sarmiento) debieron abandonar algunos de los principales candidatos, como el campeón Marcos Ligato (quien hasta su deserción venía dominando la prueba), Alejandro Cancio, Federico Villagra o David Nalbandian. En esa primera etapa sólo 28 sobrevivieron para largar el Súper Especial del Parque de Mayo.


Y ayer, la segunda parte siguió igual de complicada pese a cambiar de escenarios, pues se corrió en Albardón y Ullum. Los pisos, con muchas piedras y dañados por el paso de los autos (y en la mañana problemas de visibilidad por la niebla), empezaron a sumar víctimas por roturas en los autos. Así, tramo tras tramo se sucedieron las bajas.

¿Vuelve?


El nivel de organización del Rally de San Juan fue elogiado por la categoría, tanto por la seguridad, el diseño de los caminos y la perla del Súper Especial del Parque de Mayo. El secretario de Deportes, Jorge Chica, dijo ayer que ahora evaluarán lo que dejó el rally para determinar si puede estar presente en 2018.

Y los representantes sanjuaninos no fueron la excepción a la regla. Gabriel Abarca, quien venía realizando un gran trabajo en la clase Junior y había comenzado la segunda etapa en la segunda ubicación a apenas 6 segundos, sufrió problemas en la caja y debió desertar. 


A su vez, en la categoría menor, la RC5 se fueron quedando los otros representantes locales por diferentes problemas mecánicos: Horacio Almenzar, los hermanos Sisterna, Jorge Terusi y el reenganchado Emiliano Alaniz (Gastón Pastén había volcado el sábado).


Por otro parte, en el Argentino, Luciano Preto apeló a la regularidad pese a sufrir también varios percances y obtuvo su segunda victoria en la categoría, ya que el año pasado había ganado en Villa Dolores, Córdoba.


A su vez, con la cuarta ubicación del tucumano Gerónimo Padilla, el piloto del Peugeot 208 pasó al frente del campeonato nacional y relegó a Marcos Ligato al segundo puesto. La próxima fecha del Rally Argentino se disputará el mes que viene y será el tradicional Rally de la Manzana, en Río Negro.

El historial

El Rally de San Juan de a poco va sumando historial. En 1985 fue Gabriel Raies, a bordo de un Renault 18 GTX, quien se impuso en una competencia extremadamente larga pues recorrieron 1.217 kilómetros, con 701 kilómetros de velocidad libre. Luego pasaron más de dos décadas para volver a tener al Argentino y en la edición 2006 ganó Federico Villagra, por primera vez con un auto que marcó toda una etapa del rally nacional, el Mitsubishi Evo IX. En 2008, Alejandro Cancio fue quien anotó su nombre en el historial, también con un Mitsubishi; mientras que nueve años después lo ganó Saba.