Las expectativas de Independiente ante Binacional eran altas. Y los de Ariel Holan cumplieron con lo esperado: mostraron la gran diferencia de calidad que había entre ambos planteles en su debut por la primer fase de la Copa Sudamericana, con un contundente 4-1 sobre los incas. Ahora, el Rojo irá a los 2.335 metros de altura de Arequipa (la Conmebol no dejará jugar a los peruanos en Juliaca, su casa a 3.825 metros, porque su estadio no posee la iluminación adecuada) para intentar cerrar la serie.

Juego colectivo y presión alta. Esos fueron los componentes de la fórmula que el equipo de Holan utilizó para pasar por arriba a los peruanos, que no estuvieron a la altura de la cita. De hecho, el primer gol nació de una pelota que ni el arquero Michael Sotillo pudo despejar dentro de su área chica y que Emanuel Brítez aprovechó.Después de varios milagros cerca del arco visitante, Silvio Romero tuvo un mano a mano y definió. Su tiro tenía destino de red, pero el central Ángel Pérez lo terminó de ayudar y marcó un insólito tanto en contra.

La segunda parte, con un poco menos de intensidad, mantuvo la tónica. Los de Avellaneda sólo tardaron tres minutos en estirar el resultado, con un golazo de Juan Sánchez Miño desde afuera del área.Después de un penal inexistente sobre Martín Benítez cobrado por el juez Raphael Claus, apareció nuevamente el Chino para picarla desde los doce pasos. ¿Lo único bueno de los incas? El descuento de Jeferson Collazos, después de una buena presión sobre Brítez.