Como es costumbre en la selección de Inglaterra, el último entrenamiento antes del partido ante Croacia fue en su centro de trabajo habitual en Zelenogorsk, una pequeña localidad situada unos 50 kilómetros al norte de San Petersburgo.

Risas y buen humor fueron la nota dominante en los juegos de calentamiento con gallinas de goma del combinado inglés, que afronta su primera semifinal en 28 años, desde Italia 1990, y que en caso de superarla se situaría en una final 52 años después de la que ganó en el Mundial de Inglaterra 1966.

En cuanto a lo futbolístico, el mediocampista Jordan Henderson y el delantero Jamie Vardy se entrenaron en la última sesión preparatoria antes de la semifinal contra Croacia y estarán disponibles para el trascendental partido de mañana en Moscú.

De esta manera, no habrá inconvenientes para que Henderson, el jugador del Liverpool que había concluido con molestias en los isquiotibiales el duelo de cuartos contra Suecia, sea titular mañana para frenar a Luka Modric e Ivan Rakitic.

Por su parte, Vardy, con molestias en la zona de la ingle desde la prórroga de octavos ante Colombia, estará disponible, seguramente desde el banquillo, por si el seleccionador Gareth Southgate requiere su concurso durante la semifinal.

El conjunto inglés viajará después de comer a Moscú, donde esta tarde comparecerán en el estadio de Luzhniki para una rueda de prensa Gareth Southgate y un jugador.