Es lógico. San Juan es San Juan donde el ciclismo se vive diferente y los fanáticos anoche ya comenzaron a vivirlo de lleno. Ya en el mismo hotel donde las grandes estrellas como el belga Tom Boonen o el italiano Vincenzo Nibali se preparaban para partir al circuito de El Pinar, muchos aficionados ya esperaban para tomarse fotos con sus ídolos.

Esos mismos al que solo se los veía en el invierno sanjuanino por la TV cuando ellos -allá en la lejanía europea- se despachaban con sus hazañas.

Bueno, esas mismas figuras ayer accedían sin ningún problema a cada pedido de foto o selfie. “Es lindo que te brinden tanto cariño”, contó Nibali que junto a sus compañeros del Bahrain Merida se cansaron de sacarse fotos ante la enorme requisitoria. Eso sí, no se cansaron de destacar el “calor” de la tarde.

Ya en El Pinar, poco más de mil personas esperaban por el arribo del pelotón de las estrellas que llegaban junto al gobernador Uñac y el secretario de Deportes Jorge Chica. Con una gran decisión de la organización del evento se cobró una entrada general de 20 pesos que fue destinada en su totalidad al Hospital de Niños. Exactamente 887 personas habían abonado su ticket para colaborar con los más pequeños.

Allí, previo al corte de cinta que sirvió para inaugurar las obras de remodelación del trazado, todos los equipos tuvieron contacto directo con la gente que acudió casi en avalancha para tener su foto. No hubo vallados ni control excesivo, las figuras mundiales se mostraron a pleno con los sanjuaninos, que desde anoche comenzaron a palpitar lo que se viene dentro de unos días.