En la NBA se le llama ‘jugador franquicia’. Se trata del player del equipo que sobresale por encima de sus compañeros, cobra el mejor sueldo y brinda un plus en momentos críticos. Eso fue anoche Lionel Messi, en un Bicentenario con 25 mil espectadores. Un gol, un pase gol a Pratto y otro a Di María. Suficiente para hacer la diferencia ante una Colombia de Pekerman demasiado tibia. Argentina necesitaba cerrar el año de Eliminatorias así: con una goleada, aunque igualmente no le alcanzó para estar en zona de clasificación directa al Mundial. Es que el 2016 lo finalizará quinto, es decir por ahora jugando un repechaje ante un equipo de Oceanía. La alegría en Pocito fue casi completa. El enojo de los futbolistas para con la prensa (algo similar a lo que ocurrió durante el Mundial de 1998) es algo que empañó la fiesta de anoche. Una conferencia de prensa con todo los jugadores convocados para esta doble fecha era evitable. Se hablará tanto o más de eso, que del 3-0. Porque lo que debe importar, y que al fin y al cabo llevará o no a la Argentina a ‘Rusia 2018’, será lo que ocurra en el verde césped. El resto, lo de afuera, es eso: el contexto.



Argentina vivió su redención en Pocito. La gente así lo entendió y por eso fueron ovacionados Lionel y compañía cuando se retiraron de la cancha post goleada. Se dejaron de lado las quejas por la parquedad del plantel en su llegada y estadía en la provincia.
Los hinchas lo vivieron al partido con todo y apoyando de manera unánime casi en todo momento. Incluso, fue la noche en que Lucas Pratto se llevó una ovación difícil de olvidar para él. El ‘oasis’ lo padeció Gonzalo Higuaín, claramente el más resistido de la gente, tal cual se notó con los silbidos para él cuando ingresó en el complemento.

El niño mimado de la provincia, Emmanuel Mas, vivió un partido complejo en la marca del mejor jugador rival, Juan Guillermo Cuadrado. La habilidad del futbolista de la Juventus lo hizo esforzarse al máximo durante los 90’ e incluso por eso estuvo más contenido en la marca que lo habitual en el juego del ex-San Martín.

La selección encontró una luz en el camino y debe aferrarse a ella. No es poco saber que cuando Messi funciona, el resto es capaz de plegarse y ganar un partido de forma clara, como paso anoche, en base a contundencia y la jerarquía de su número diez.
Estará en Bauza y sus dirigidos ser capaces de sobreponerse a los problemas que vengan a futuro. Hay tiempo de pensar y analizar bastante porque la próxima fecha por Eliminatorias recién será en marzo del 2017, recibiendo a Chile, aún en sede a confirmar.

No habrá que pensar que por este 3-0 está todo bien. Hay muchas cosas por ajustar, pero ahora con cierta tranquilidad de saber que se está un pasito más cerca de Rusia.

Restan seis escalas en el camino rumbo al Mundial dentro de dos años. Está todo muy parejo como para imaginar que será solo cuestión de tiempo estar entre los cuatro mejores. Por más que Messi luzca la camiseta albiceleste y demuestre, como ocurrió anoche en San Juan, que la vida con él es muy bella...

El Dato

Recta final

Luego del parate de fin de año, se vendrán las últimas seis fechas de las Eliminatorias.
Los partidos de Argentina que le restan: Chile, Bolivia, Uruguay,Venezuela, Perú y Ecuador.

5

La cantidad de veces que durante estas Eliminatorias la Selección argentina no recibió goles. En cuatro de esos partidos sumó una victoria y en el restante empató.

Una rareza

Argentina tiene un poder ofensivo muy grande, aunque la particularidad en estas Eliminatorias es que el futbolista con más gritos es Messi con 3. El goleador es el uruguayo Edison Cavani, con 8.