Lionel Messi fue una de las grandes figuras del fútbol que estuvo presente en el Santiago Bernabéu para ver la Superfinal de la Copa Libertadores entre Boca y River. Invitado por la Federación Española, La Pulga fue al estadio con su papá, su hijo mayor, Thiago, y sus compañeros Busquets y Jordi Alba. Fiel a su perfil bajo, el astro del Barcelona vivió el encuentro de manera muy medida, pero las cámaras pudieron tomar su reacción en el gol de Boca.

Según las imágenes de "El día después", un programa que se encarga de mostrar el otro lado de los partidos de fútbol, Messi vivió el gol de Darío Bendetto de una manera muy particular. En medio de la carrera del delantero xeneize, en la que dejó tirado a Jonatan Maidana, La Pulga se puso de pie y tras la definición, se quedó congelado, con la boca abierta.

Mientras eso ocurría, el locutor del informe describió la situación con un claro guiño a River: "Aprovechamos para intuir que Messi muy de Boca no parece", relató la voz en off que acompañó el excelente informe.

Siempre se dijo que Messi tenía una cierta simpatía por el Millonario, aunque nunca quedó claro. La Pulga manifestó que le tiran los colores de Newell's, equipo en donde hizo las inferiores, pero hay fotos también con la camiseta de River.

Una de ellas apareció tras la final del Mundial de Clubes en el 2015, después de que el Barcelona le ganara al Millonario 3-1. En los vestuarios, el crack fue fotografiado con la casaca de la banda colgada en su cuello unto al utilero del club.