La carrera de Emanuel Ginóbili en la NBA da para hacer montones de documentales, series y películas. El mejor basquetbolista argentino de la historia fue protagonista de la liga desde el primer día y su retiro no hace más que darle el cierre a una campaña de leyenda.

 

Aquí, un repaso a diez momentos inolvidables de Manu en San Antonio:

 

1- El día de su debut

 

El 29 de octubre de 2002 vistió por primera vez la camiseta número 20 de San Antonio Spurs. Ingresó en el cierre del primer cuarto y estuvo 20 minutos en cancha. Ese partido lo terminó con 7 puntos, dos rebotes, tres asistencias y ¡cuatro! robos. Ese sería el comienzo de una historia de amor entre el bahiense y Gregg Popovich, su entrenador.

 

 

 

 

2- Su primer título con los Spurs

 

Fue en su temporada debut. El 15 de junio de 2003 metió 11 puntos y San Antonio venció a New Jersey Nets por 88-77 para cerrar la serie por 4-2. Ese iba a ser el segundo anillo de la historia de San Antonio y el primero de la dinastía Duncan-Parker-Ginóbili. El bahiense terminó con 7,6 puntos en 20,7 minutos en temporada regular y 9,4 en 27,5 en playoffs.

 

 

 

3- El día de los 48 puntos

 

El 21 de enero de 2005 alcanzó la máxima anotación de su carrera. Fue ante Phoenix Suns, de visitante, en la victoria por 128-123. Ese día metió 16 de sus 22 tiros de campo, 5 de 7 triples y 11 de 12 libres. Además, terminó con 6 asistencias y 5 rebotes.

 

 

 

4- Su primer Juego de las Estrellas

 

El 20 de febrero de 2005 jugó en Denver para el equipo del Oeste, tras ser elegido como suplente por los entrenadores de la Liga. Fue la primera de sus dos apariciones en el partido que reúne a los mejores jugador de la NBA. Luego, repetiría en Los Angeles 2011.

 

 

 

 

5- Su segundo título en la NBA

 

El 23 de junio de 2005 se consagró una vez más con San Antonio, ahora con mayor protagonismo en el equipo. En las finales, Spurs le ganó una verdadera batalla a Detroit Pistons por 4-3 y en el séptimo partido de esa serie Manu terminó con 23 puntos, 11 de ellos en el último cuarto. Ese partido terminó con victoria por 81-74 gracias a él. Tim Duncan sería luego elegido MVP de esas finales, con el argentino muy cerca en la votación.

 

 

 

6- Su tercer título, con otro Generación Dorada

 

El 14 de junio de 2007 sumó un anillo más con San Antonio y esta vez lo hizo con su amigo Fabricio Oberto de compañero. En la final, los Spurs barrieron por 4-0 a Cleveland Cavaliers, de LeBron James, y en el último partido anotó 27 puntos. En semifinales del Oeste, ante Phoenix, había tenido descollantes actuaciones.

 

 

 

7- Premio al mejor sexto hombre de la NBA

 

El 21 de abril de 2008 Manu fue premiado como el Mejor Sexto Hombre por haber sido el más valioso jugador de la liga saliendo entre los que no son titulares. Esa temporada arrancó desde el banco en 51 de 74 partidos y terminó arrasando con la votación con 123 de los 124 votos posibles. Fue el goleador de los Spurs, que no pudieron ser campeones.

 

 

 

8- Su cuarto título

 

La última de las coronas se hizo desear siete años, pero finalmente llegó el 15 de junio de 2014. Otra vez, ante LeBron James. Fue victoria de San Antonio por 4-1 sobre Miami Heat, con buenas actuaciones de Manu. Fue la revancha de la derrota sufrida un año antes frente al mismo rival. Quedó para el recuerdo una volcada sobre Chris Bosh.

 

 

 

 

 

9- El memorable tapón a James Harden

 

El 9 de mayo de 2017, con 39 años, demostró que es un hueso duro de roer. Lo sufrió uno de sus alumnos en lo que se refiere al euro step, su marca registrada. En el cierre del quinto partido de la serie de semifinales del Oeste ante Houston, el escolta de los Rockets tenía la última pelota para ganar el partido, pero Manu apareció donde nadie lo esperaba y le tapó una pelota histórica.

 

 

 

 

10- La despedida

 

El 22 de abril de 2018 jugó en el AT&T Center de San Antonio el que podría haber sido su último partido ante el público que lo vio brillar. Fue en el cuarto partido de la serie con Golden State. El estadio se preparó pensando en que esa podía ser su despedida, pero el propio Manu se encargó de impedirlo aunque sea por un par de días. Jugó un gran partido y estiró la definición a un quinto juego, que sería luego victoria de los Warriors. Ese sí sería el del final.

 

 

 

 

Fuente: Clarín