Impecable. A los 47 años, Leo Avila sigue vigente. Acaba de terminar la temporada como arquero de Sport Argentino de Albardón, pero este fin de año es diferente. Esta semana, Avila recibió el diploma como técnico habilitado con Licencia A para dirigir torneo local y regional. Ese paso lo puso sin querer en la elección más difícil de su vida: seguir atajando o meterse en la dirección técnica definitivamente.
Mientras eso se resuelve, el Loco, el Leo sigue viviendo fútbol las 24 horas. Esta semana fue demasiado intensa porque el martes Avila empezó como entrenador de arqueros en el nuevo cuerpo técnico de Unión, que encabeza Juan Colarte, agregándole más vértigo a un final de año más que especial.
“Es una semana muy linda, muy intensa. Me entregaron el diploma por aprobar el segundo año de la escuela de técnicos y quedé habilitado para dirigir en el medio local y regional. Pero también se presentó lo de Unión, como entrenador de arqueros. Todo junto. Ahora meterse de cabeza en pasar la eliminatoria contra Belgrano de Media Agua y recién proyectar”, anticipó Leo.
Debutó con 16 en San Martín y en un clásico contra Desamparados. Empezó así una carrera que ya tiene 25 años y lo puso en el arco de casi todos los clubes de San Juan: San Martín, Sportivo, Trinidad, Unión, Peñarol, Villa Obrera, Del Bono, Alianza. En Mendoza, también atajó todo con Argentino, Luján de Cuyo y Montecaseros. Hace 10 años, empezó su romance con el fútbol del interior y logró cosas grandes. Leo Avila tiene 4 Copa de Campeones ganadas en 6 finales disputadas. Ganó dos con la ADA de Albardón, otra con Instituto La Laja y una más con San Miguel. En Albardón, este año jugó en Sport Argentino previo paso por el fútbol caucetero.
“Le debo mucho al fútbol. Empecé en la escuelita de Alianza y fuimos con Luz y Fuerza a La Serena para jugar allá. Tenía 14 años y se interesaron en que me vaya a Chile pero no pudieron acordar con Alianza. Estuve dos años sin jugar hasta que Juan Chica me llevó a San Martín y debuté. Pase por casi todos los de San Juan. Con Sportivo estuvo en el Nacional B, con Peñarol logramos el ascenso. Todos me marcaron, en todos aprendí. Llegó el ciclo del fútbol albardonero y lo disfruté muchísimo. Pero también se empezó a dar lo de entrenar. En Trinidad, estuvo con Andrés Lavorante en este año. También con la selección de la Liga Sanjuanina en la Copa País con Ricardo Dillon. Ahora, se da lo de Unión con Juan Colarte. Es un momento para decidir. Si me gustaría una temporada más tal vez atajando, pero entrenando hay más chances de continuidad laboral y en eso, uno tiene que ser muy maduro”, reflexionó Avila.
La llegada a Unión fue sorpresiva y Avila admite que no fue cómodo el momento pero que ellos, no tienen nada que ver en cómo se dieron las cosas. Se enfoca en lo que viene como buen entrenador: “Ya pasó ese trance y ahora, es fútbol. Lo hablamos con los jugadores y la motivación para avanzar a la Tercera Fase del Regional tiene que potenciarlos. Es un plantel grande, con ambiciones. Luego, vendrá la final contra Sportivo por el Clausura, pero lo primero es Belgrano de Media Agua. Unión tiene sus argumentos para poder clasificar”.