Justo en la previa de la llegada del nuevo año, la familia de Ana Carrizo sufrió un duro golpe. En plena madrugada de este lunes se produjo un incendio en el interior de su vivienda que consumió por completo las dos habitaciones de sus tres hijos. Ellos, se salvaron porque justo se habían acostado junto a ella, en su pieza.

“Por suerte estamos los cuatro bien, tenemos que agradecer. Pero perdí todas las cosas de ellos, se quedaron con lo puesto”, relató la mujer que vive en la Villa Centenario, en Chimbas.

El techo de la zona de la casa afectada por el siniesto quedó destruido.

Según relató, en el momento en que comenzaron las llamas, sus tres hijos de 14, 10 y 8 años, estaban junto a ella. Fue su hija mayor quien se levantó al baño y advirtió lo que estaba sucediendo. “Empezó a gritar: ‘Mamá, mamá’. Yo no entendía nada, pero me levanté y de inmediato saqué a mis hijos de la casa. Los vecinos llamaron a los bomberos y a la Policía, pero el fuego ya había agarrado las dos piezas y parte del comedor”, relató la mujer de 36 años que tiene un plan del Estado y trabaja lavando vajillas de una empresa que las alquila para eventos.

Y agregó que “parece que todo comenzó por un cortocircuito y las llamas avanzaron rápido porque la construcción de esa parte de la casa era de cañas y palos. Perdimos sus camas, su ropa, su calzado y dinero que tenía guardado. Yo estoy separada hace 7 años y él es un papá presente, me ayuda, pero se hace difícil”.

Por otro lado, Ana comentó que ya se acercó gente del municipio y los va a ayudar con algunas cosas. Sin embargo, siguen necesitando colaboración. Por eso indicó que, su hija de 14 años calza 38, su hijo de 10 años calza 35 y el de 8, 33/34.

Quien quiera colaborar con la familia puede comunicarse con ella al 264-4427666.