En una casa humilde ubicada en las calles Solís y Tupac Amaru de Rosario, Santa Fe, personal policial encontró a una mujer con un cuchillo clavado en la espalda. La había apuñalado su hijo de 13 años porque lo despertó para ir a la escuela.

Mientras le hacía el desayuno de espaldas a él, el chico se levantó de la cama, fue a la cocina, tomó un cuchillo tipo tramontina y apuñaló a su mamá.

El inesperado ataque tuvo lugar esta mañana alrededor de las 7.30. La mujer de 38 años perdió mucha sangre pero seguía consciente cuando llegó la policía. Alcanzó a contar los motivos por los cuales su hijo la había agredido.

La mujer fue trasladada de urgencia al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA) para que la atendieran por la herida de arma blanca. En tanto, la Policía Comunitaria trasladó al agresor a la comisaría 12ª, donde quedó a disposición de la Justicia de Menores.

El arma fue secuestrada y el menor quedó demorado aunque, por su edad, se estima que en las próximas horas recuperará su libertad. La mamá está fuera de peligro.

La Justicia tendrá que determinar ahora si es posible que ambos vuelvan a convivir. Para eso, serán claves los testimonios de las dos partes y el seguimiento de un equipo interdisciplinario para el adolescente