Un vecino de Pocito vivió momentos de terror este viernes último por la tarde pero recién se conoció en las últimas horas, cuando seis personas —al menos tres de ellas vestidas con camperas con la sigla Policía Federal Argentina y armadas— ingresaron a su vivienda, lo golpearon y le robaron una importante suma de dinero. La Policía investiga el hecho y ya trabaja en el relevamiento de cámaras y en el hallazgo de objetos sospechosos en un descampado cercano.
El ataque ocurrió alrededor de las 15.30 del viernes, en una vivienda ubicada sobre calle David Chávez, entre Sarmiento y Rivadavia. Allí, D. C., de 31 años, denunció que vio dentro de su propiedad a cinco hombres y una mujer, tres de ellos con camperas azules con las letras PFA en amarillo. Todos portaban armas tipo revólver.
Según su relato, los agresores lo redujeron dentro del domicilio, lo golpearon y le robaron 150 mil pesos. Tras huir, el damnificado alcanzó a ver que los delincuentes subían a un auto verde, aunque no pudo precisar la marca o el modelo.
Minutos después, personal de emergencias llegó al lugar y Cabrera fue asistido y trasladado al Hospital Cantoni para su atención.
La investigación quedó en manos de la UFI Delitos contra la Propiedad, bajo directivas del ayudante fiscal Martín Morando. Se ordenó tomar denuncia formal, realizar relevamiento de cámaras en un radio de 500 metros, tanto públicas como privadas, y convocar a Criminalística para tareas fotográficas y de documentación.
Hallazgo de objetos sospechosos
Paralelamente, personal policial que realizaba un requerimiento en Ruta 40 y Calle 9 encontró elementos presuntamente vinculados al caso. En el lugar, Jorge Espejo, de 38 años, vecino de la zona, declaró que mientras limpiaba el patio trasero de su vivienda —que colinda con un descampado— halló un motor de aire acondicionado marca Sanyo de 2500 frigorías, de color blanco.
La Policía evalúa si ese objeto fue descartado por los agresores en su huida.
La investigación continúa y no se descarta ninguna hipótesis, mientras los efectivos intentan identificar el vehículo utilizado y verificar si la indumentaria con siglas “PFA” correspondía a un intento de engaño por parte de los delincuentes.

