Buenos Aires, 15 de marzo.- "Me parecía imposible haber generado esta corriente de confianza, de afecto, de identidad… con un sector que no tiene las viejas mañas y que tiene todo el futuro por delante. Su trabajo, su esfuerzo, su compromiso son lo que realmente me lleva cada vez más a seguir apostando a la transformación y a la profundización del modelo", indicó la mandataria.

Minutos antes, la mandataria había bromeado con el grupo de militantes presente y hasta se había animado a intercambiar algunas palabras en su discurso, en donde destacó el crecimiento del mercado avícola en el país.

“Cristina, te quiero más que a mi vieja”, le gritaron. Y la Presidente respondió: “No, con la vieja no, che. Yo a los jóvenes los quiero tanto como a mis hijos".

La mandataria también aceptó parar su discurso para pedir un médico para una persona que se había desmayado y aprovechó para hacer un freno e indicar: "Yo quiero agradecer a todos. A los hombres, a las mujeres, a los jóvenes que me brindan su aliento, me transmiten su fuerza. Quiero decirles que los quiero mucho".