El martes, el Consejo de la Magistratura confeccionó la terna para juez de la Sala IV de la Cámara Civil, cargo que quedó vacante tras la jubilación de María Josefina Nacif en agosto. Los tres profesionales que estarán en la consideración de la Cámara de Diputados de San Juan son: los jueces de Familia, Marianela López y Esteban De la Torre, y el funcionario de la Fiscalía de Estado, Javier Pacheco Aguiar. ¿Hay un favorito para el puesto?
En el terreno de las especulaciones, los cambios son vertiginosos. Sin ir más lejos, en la previa a la sesión de la Magistratura, los nombres que sonaban como preferidos -por sus vinculaciones políticas y judiciales- eran los de Pablo De Sanctis, hijo del cortista Guillermo De Sanctis, la jueza del Contencioso Administrativo, Adriana Tettamanti, y el juez de Familia, De la Torre. Sólo uno de los mencionados, el tercero, prosperó. ¿Por qué?
Aparentemente, de acuerdo a los operadores judiciales, primó el perfil “técnico” y “académico” de los postulantes. Así trascendió desde el seno del propio órgano extrapoder que funciona bajo la órbita del Poder Judicial y que está compuesto por el cortista Juan José Victoria, la ministra de Gobierno, Laura Palma, la diputada peronista, Fernanda Paredes, y los representantes de la abogacía, Raúl Acosta y Valeria Torres. Aunque no hubo información precisa sobre el sentido del voto de cada uno de los integrantes.
Ahora la pelota está en la Legislatura provincial. Los 36 diputados definirán quién es el próximo camarista, un puesto que involucra mayor ingreso monetario y más poder en la estructura judicial. ¿Cómo viene el punteo legislativo? Por ahora, como la terna tiene un carácter “profesional”, no hubo comunicaciones políticas al respecto. Es decir, ni tácita ni explícitamente hubo sugerencias a los presidentes de bloques. Pero hay conexiones políticas inevitables de los candidatos.
DIARIO DE CUYO publicó que la jueza López fue candidata a diputada en el 2015 por la lista de Rodolfo Colombo, fundador de Actuar y actual jefe de Asesores del Gobierno. La mujer además es la expresidenta del Foro de Abogados, cargo al que llegó en el 2011 bajo la bandera de no pertenecer a ningún partido político. Sin embargo, tiene sintonía con el oficialismo.
De hecho, en el último acto del Foro, la conducción de Franco Montes eligió a López para que hablara en representación de los letrados que cumplían 25 años en el ejercicio de la profesión, en lugar de la Presidenta de la Corte de Justicia y primer mujer en la historia en llegar al máximo tribunal, Adriana García Nieto.
Además, recientemente, la hija de la jueza, Macarena Bravo López, participó de las elecciones de la misma institución e ingresó como vocal por la lista oficialista de Abogacía Activa (PRO más bloquismo). Ergo, es posible inferir que al menos esos dos bloques podrían acompañar a López en la votación. Incluso, Producción y Trabajo puede sumarse.
Más rezagado, está De la Torre, quien proviene del mundo del litigio, pese a ser sobrino del cortista Guillermo De Sanctis. Si bien es descripto como un profesional de amplia capacidad, tiene un antecedente que puede funcionar como impulsor o como mochila. El actual juez de Familia ingresó al cargo de juez de Primera Instancia Civil por propuesta de la diputada uñaquista Cristina López en diciembre del 2016. Tuvo el acompañamiento de 32 legisladores con mayoría peronista.
Finalmente, la incógnita reside en Pacheco Aguiar. El empleado de la Fiscalía de Estado participó de una terna anterior por el Juzgado de Paz de la Capital. No tuvo suerte. Ganó el exasesor Letrado del Gobierno, el uñaquista Carlos Lorenzo, que fue uno de los pocos exfuncionarios designados en esa sesión legislativa. ¿Un tapado? Se sabrá con el transcurso de los días. Cabe recordar que primero, aunque no es un paso obligatorio, la Comisión de Justicia y Seguridad de la Cámara toma las entrevistas a los candidatos antes de la instancia de debate en el recinto.

