Las víctimas de trata en Argentina son captadas en el Norte del país y explotadas en el Sur, aseguró hoy la representante del Ministerio de Justicia de la Nación, María Fernández Rodríguez, al dejar inaugurado el Consejo Federal para la Lucha contra la Trata y Explotación de Personas y para la Protección y Asistencia a la Víctimas.

El Consejo empezó a sesionar en la provincia de San Juan, con la participación de representantes de los poderes Ejecutivo y Judicial e instituciones de la sociedad civil.El encuentro es encabezado por la subsecretaria de Acceso a la Justicia del Ministerio de Justicia, María Fernanda Rodríguez, quien aseguró que ‘regionalmente los casos de captación se da mucho en provincias del Norte y la explotación en el Centro y en el Sur‘.

En ese sentido, añadió que ‘la dinámica más habitual es por ejemplo la captación de mujeres en Misiones o el Norte, donde hay mujeres muy bonitas de colonias polacas o alemanas, y que son llevadas al Sur y a provincias con industrias extractivas, con mucho hombre solo y con una dinámica que facilita la existencia de este tipo de delito‘.

Sobre la sesión del Consejo, la funcionaria contó que ‘debatimos sobre la prevención del delito de la trata de personas; la investigación, persecución y sanción a los responsables del delito; la protección y asistencia a las víctimas y el informe anual y de supervisión de la unidad de bienes incautados y decomisados‘.

Rodríguez dejó en claro que la trata ‘es un tema sumamente serio y persistente, que a pesar de los esfuerzos de Argentina de más de 10 años, no cesa‘, y que ‘buscamos una política más eficiente en todas las dimensiones, perseguir y sancionar el delito, reparar y reconstituir a las víctimas y prevenir para que no ocurra más‘.

Dijo que ‘es un problema de una dimensión importante para hombres y mujeres, donde las explotaciones más comunes son las laboral y sexual‘ y destacó que ‘con el Programa Nacional de Rescate del Ministerio de Justicia llevamos más de 11 mil víctimas rescatadas‘.Agregó que frente a la trata, ‘la denuncia es difícil, porque son víctimas que provienen de sectores de mucha vulnerabilidad y exclusión social, que muchas veces están en un estatus migratorio no legal‘, y que ‘esas son las herramientas que utiliza el tratante para generar mecanismos de sujeción y de no denuncia‘.

Indicó que ‘como se trata de personas de entornos desfavorecidos, a veces creen que esa es la forma en que pueden ganarse la vida y tienen una especie de resignación o normalidad, respecto de estos estándares de posibles trabajos‘.El Consejo Federal para la Lucha contra la Trata y Explotación de Personas y para la Protección y Asistencia a la Víctimas deliberará hasta mañana.