Luego de la denuncia de la madre de un alumno de 11 años de la escuela Marino Bartolomé Carreras, de Rivadavia, que aseguró que el portero ingresó al aula agarró de los pelos a su hijo y aprisionó su cabeza hacia abajo al grito de "te voy a partir" y "voy a reventar a todos", las autoridades del Ministerio de Educación intervinieron en el caso. Como consecuencia, analizan alejar de los niños al acusado hasta tanto finalice la investigación.

“El viernes por la tarde realizamos entrevistas a los niños, los papás, los docentes y al hombre acusado. Ahora estamos realizando el proceso administrativo y, dado que él no pertenece a la planta docente sino que es personal de logística del Ministerio, seguramente se tomará la medida de alejarlo de los niños y destinarlo a la realización de otras tareas”, comentó Mónica Gutiérrez, directora de Gabinete del Ministerio de Educación.

Y agregó que “nosotros seguiremos con la investigación, pero ya esta tarde se tomará la decisión preventiva con el fin de resguardar los derechos de todos, especialmente de los niños”.

El caso salió a la luz cuando la madre del niño, Cintia Ocaña, se enteró de lo sucedió a través del relato de su hijo y se lo informó a los docentes y directivos del establecimiento. Luego, se dirigió a la Comisaría 27ma donde realizó una exposición y se presentó en el Ministerio de Educación.

El portero apuntado se llama Pablo Flores, de 33 años, que vive en una casa que hay en el establecimiento.