Mucha, mucha gente. Miles de personas de todos los departamentos coparon la Avenida Ignacio de la Roza desde Mendoza hasta Urquiza para ser parte del Carrusel del Sol. Desde los más chicos hasta los más grandes, todos disfrutaron de una noche mágica que tuvo de todo.

Desde temprano familias enteras se apostaron en la arteria para conseguir un lugar privilegiado para mirar el espectáculo. Muchas de ellas llegaron al lugar con sillas, reposeras y conservadoras con bebidas y comida. Así, colmaron toda la Avenida.

El calor fue sin dudas uno de los protagonistas de la noche. Los casi 40° fueron sentidos por los sanjuaninos, que se las arreglaron para combatirlo. Abanicos improvisados, ropa arremangada y mucha bebida fueron postales que predominaron en el Carrusel.

El fervor pudo más que el calor.