El mate, fiel compañía de los sanjuaninos y también de los nadadores que participaron de la dura competencia.

Enviado especial

Atrás quedaron las visitas a los montes donde se dieron las batallas más duras, también el paso obligado y desgarrador por el cementerio de Darwin; y este jueves los veteranos sanjuaninos tuvieron el primer día libre desde el sábado que han pisado las Islas Malvinas. Luego de tanta movilización interna llegó el relax, el momento de distracción, necesario tras la tensión que significó para los excombatientes recorrer lugares donde la guerra dejó sus huellas.

Este jueves no había un plan fijo. El que quería iba a una playa cercana, alrededor de 5 km de la ciudad, donde había una competencia de nado en aguas abiertas frías, con muchos argentinos como participantes. La barra sanjuanina alentó y no dejó de sorprenderse de la valentía de meterse al mar con temperaturas tan bajas, incluso algunos lo hicieron únicamente con un short de baño.

Se realizó el Desafío Atlántico Sur en Beach Day a unos pocos kilómetros de la ciudad. Nadaron en aguas abiertas y frías un total de 3.000 metros.

Otros optaron por dar un paseo guiado por Stanley para identificar los lugares destacados de la ciudad. Y, aprovechando que el tiempo acompañó la mañana, recorrer sitios donde venden artesanías o cosas típicas de la Isla.

Los veteranos recorrieron un supermercado que vende de todo y las casas de regalos que hay en Stanley.

La hora del almuerzo tuvo en su haber una sorpresa: le cantaron el feliz cumpleaños a José Luis Muñóz, el veterano sanjuanino que celebró los flamantes 54 años en Malvinas.
Este viernes también tendrán libre, a la espera de la partida a Río Gallegos que está prevista para el sábado al mediodía, siempre que el estado del tiempo acompañe.