El edificio ubicado en la calle Moreno N° 699 de Ramos Mejía fue inaugurado en 1946 y funcionó como Cuartel Central de Bomberos de La Matanza. Más allá del bronce ganado tras más de 60 años junto a los vecinos, hoy viven una triste realidad: tuvieron que poner su sede en venta para pagar una deuda millonaria con la AFIP.

Este martes fue un día muy triste porque tuvieron que colgarle el cartel de la inmobiliaria y los trabajadores fueron testigos de que la esperanza de salir adelante está muy lejos. "Es la única opción que tenemos", dijo apenado a TN Gustavo Cid, el presidente de la institución.

El cuerpo cuenta con 21 integrantes de la Comisión Directiva, 223 bomberos voluntarios, entre hombres y mujeres; 42 integrantes de la Reserva Activa y 13 chicos en la escuela de cadetes.

En un video que compartieron apelan a las autoridades y les piden ayuda. Además, hacen una descripción de las carencias que tienen y la deuda millonaria que enfrentan.

Esa sirena que sonó infinidad de veces ya no lo hará. Las autobombas no saldrán a toda velocidad por esos portones para apagar un incendio o salvar una vida. Ese edificio histórico, con el escudo de los bomberos despintados y el cartel de venta colgado en la puerta, vive su día mas triste porque el final tan temido podría llegar.

Sin embrago, su presidente no baja las brazos y dice que no van a parar hasta lograr su misión. Es que Cid es bombero hace 25 años, y hace uno que el cuartel está a su mando. "Necesitamos el apoyo de todas las autoridades para que la institución salga adelante. El Estado no nos puede abandonar. Este equipo es muy importante para la zona. Lo pusimos en venta para pagar parte de la deuda que es millonaria. Estamos todo muy tristes", concluyó conmovido.